También conocidos como cálculos vesicales son acumulaciones de minerales que se endurecen en el interior de la vejiga y alcanzan tamaños que dificultan su expulsión al momento de orinar y/o no se pueden expulsar provocando problemas urinarios.

¿Cuáles son los síntomas de los cálculos en la vejiga?

Algunos cálculos pueden alcanzar tamaños considerables que pueden no causar problemas, no obstante al permanecer mayor tiempo en el área pueden llegar a irritar las paredes de la vejiga y en algunos casos impedir la expulsión de la orina, haciendo que la persona requiera de intervención quirúrgica

Entre los síntomas podemos destacar:

  • Dolor en la parte inferior del abdomen.
  • Aumento en la frecuencia para ir a orinar.
  • Dolor al orinar.
  • Dificultad para expulsar la orina.
  • Sangrado en la orina.
  • Orina con consistencia anormal (mal olor o coloración diferente).

¿Por qué surgen?

Estos se originan ante un vaciado incompleto de la vejiga, debido al aumento de los minerales en la orina que se cristalizan y van aumentando en tamaño.

En el caso de los hombres, padecer de hiperplasia prostática benigna o HPB puede ocasionar mayor probabilidad de que se formen cálculos vesicales, ya que la próstata se inflama lo cual dificulta la expulsión completa de la orina.

Los cálculos renales que se desprenden del riñon pueden viajar hasta la vejiga y si tienen un tamaño considerable, llegar a obstruir la misma.

La mejor forma de evitar la formación de los cálculos vesicales es con la ingesta constante de agua, no obstante a diferencia de lo que se piensa, cada persona requiere más o menos cantidad de agua para mantenerse bien hidratado.